Y te dicen: “ Nos hemos decidido por alquilar este piso solo por el trato recibido. Tú has sido la razón de nuestra decisión a pesar de los inconvenientes que le podemos encontrar “.
Así empecé el día. Buah! Lo primero que me vino a la cabeza es preguntarme ¿ pero como te han tratado? ¿Cómo puede ser que cumplir con mi trabajo y dirigirme a los demás como me gustaría que lo hicieran conmigo, haga que sea la razón de una decisión tan importante?
Por otro lado, me pregunto qué está pasando que hace que la personas nos agredamos sin motivo ni causa?
Una pareja de otra provincia que viene a vivir a nuestra ciudad y que está buscando su casa, o sea, el lugar donde disfrutas con los tuyos de tu vida y que prioriza el trato recibido a las características de la misma, indica que algo no va bien.
No voy a negar que me agrada mucho hacer sentir bien al prójimo pero me da pena saber de primera mano que existen personas sin tacto y que estropean nuestra profesión . Me gusta creer que no solo vendo, que satisfago necesidades y que los ayudo a ser más felices y cubrir sus necesidades quedando contentos.
Mi día a día es que mis clientes cuentes conmigo para otras operaciones y que me digan : Te va a llamar ….
